lunes, 8 de abril de 2019

Lucha estéril



   Fue el verano pasado (2018), cuando este cinamomo de gran porte tuvo la mala suerte que una de sus ramas principales se rompiera. Ante el posible peligro para los transeúntes,  los gestores municipales decidieron talar el enorme árbol.





    Intentó el árbol superar el trance echando multitud de hijuelos en otoño del pasado año aprovechando las primeras lluvias, ya que estos como otros árboles callejeros, están condicionados al agua de lluvia.

   Los encargados de limpieza arrancaron todos los brotes. Llegó el periodo de reposo en savia parada y ciertamente pensamos que estaba muerto. Sin embargo a principios de abril (2019) el vetusto cinamomo aún está vivo y lucha por recuperar su espacio. Sin duda es una batalla perdida, ojalá nos equivocaramos, y conmueve sinceramente ese afán por vivir que tiene este maltrecho ser.

Si desean recordar o saber  de los cinamomos pueden ojear éste enlace.


https://espiritudearbol.blogspot.com/2013_01_01_archive.html